Abstract:
La problemática que viven las personas trasplantadas renales de la
ciudad de Mar del Plata, en relación a las dificultades inherentes a la
reinserción laboral, surge para nosotras como consecuencia de la
experiencia compartida con algunas personas trasplantadas, durante la
denominada "Semana Universitaria de la Donación de Organos"
(Agosto, 1998). Dicha actividad fue un proyecto que generamos y
concretamos, mientras realizábamos nuestra Práctica Clínica en la
Secretaría de Extensión de la Facultad de Ciencias de la Salud y
Servicio Social de la Universidad Nacional de Mar del Plata.
A partir de aquí comenzamos a plantearnos una serie de interrogantes:
¿qué dificultades encuentran estas personas cuando intentan recuperar
su rol como trabajador?, ¿qué actitud adoptan los empleadores, frente a
la demanda de empleo de una persona trasplantada renal?, ¿cuáles son
los factores psicosociales que limitan la capacidad para integrarse a su
vida laboral?, ¿Cuál es el rol profesional del T.O. en esta área?
No encontrábamos respuestas concretas a estas preguntas..., no
encontrábamos informantes claves que nos orientaran en nuestra
búsqueda e inquietudes...
Actualmente se recurre a la implementación de políticas sociales,
desarrolladas por instituciones específicas, responsables de la actividad
trasplantológica a nivel local, que llevan a cabo, como paliativo, una
acción asistencial.
Reconocer el carácter social del problema que sufre el trasplantado, nos
lleva a identificar a una persona con connotaciones específicas y
diferentes, valoradas negativamente por la sociedad.
No obstante, ante esta realidad, nuestro entusiasmo e interés nos
impulsaron a realizar un análisis más profundo en el marco de nuestra
Tesis de Grado.
La obtención de un trabajo resulta altamente deseable, ya que a través
del mismo se logran los medios propicios para el sustento personal y su
consecuente independencia y autonomía. La falta de empleo o dificultad para la reinserción laboral del
trasplantado, constituye una barrera que lo ubica en una situación de
marginalidad y postergación social.
Consideramos que todo esto, atenta contra su salud psicofísica e
integral, haciendo necesaria una intervención, dentro del marco de la
dignificación humana, que tienda al logro de una auténtica calidad de
vida.
Hoy en día gran parte de los trasplantados renales en nuestra
comunidad, carecen de un empleo. La ausencia e interrupción de la
ocupación, atentan contra su salud psico-física, generando un estado de
estrés, y en consecuencia el riesgo de perder el órgano implantado. A
este se suman otros factores tales como: la necesidad de redefinir su rol
en la estructura familiar y social, la desocupación, el temor a su propia
muerte y a la de un par, al sufrimiento, a las internaciones reiteradas por
la vulnerabilidad a las enfermedades, a sentimientos de inseguridad,
angustia y de inferioridad.
Para finalizar queremos destacar que este estudio abre un nuevo campo
de investigación y práctica profesional, como así también la posibilidad
de formar futuros terapistas ocupacionales, capacitados en este tema.