Resumen:
En el año 1999 y con motivo de mi pasantía pre-profesional, tuve oportunidad de
insertarme en el Servicio Social del Juzgado de Menores N° 2, bajo la supervisión de la
Licenciada Teresa Durante. De la valiosa experiencia allí obtenida, pude ir delineando
el tema que ocupará mi tesis de licenciatura.
Al interactuar cotidianamente con profesionales del servicio social, no ya en el
ámbito académico sino en el laboral, visualicé algunas cuestiones del ejercicio
profesional que traían aparejadas consigo cierto grado de cansancio personal, algún
malestar respecto del funcionamiento de la institución, tensión o ansiedad ante
determinadas intervenciones.
De esta forma llegué a la idea preliminar que en ciertas situaciones, el asistente
social puede formar parte de un proceso paulatino de desgaste profesional caracterizado
por una serie de sentimientos como pueden ser el desánimo, la impotencia ,la angustia,
entre otros , producto tanto de las características de la propia actividad profesional
como de las situaciones vivenciadas en el lugar de trabajo.
A partir de esta primera hipótesis , comencé a buscar bibliografia referente a las
consecuencias de orden afectivo, fisiológico- médico, psicológicas, de relación, que
podían traer consigo algún malestar o proceso de desgaste, específico del desempeño
laboral en ciertas áreas o profesiones ,especialmente en aquellas consideradas de
servicio.
Fue así que encontré la existencia de un síndrome , el síndrome de burnout
cuya traducción más clara sería la de incendio, quemazón, llamarada ,haciendo
referencia a la aparición de una sintomatología, que si bien es progresiva, al hacerse
clara y evidente, tiene una característica: sensación de desgaste .El concepto implica
un deterioro o agotamiento producido por la demanda excesiva de recursos físicos y
emocionales que lleva consigo el ejercicio de una determinada profesión y hace
referencia, además, a un tipo particular de estrés laboral e institucional.